lunes, 18 de junio de 2012

Cuéntame un Cuento - 3º Premio



Por Iván Priego, 1º infantil C

Érase una vez una leona que comía mucho, y un día, entró en mi casa y vio un árbol que crecía dentro de un cuadro que estaba en el comedor.

El árbol, tenía las ramas llenas de caramelos. La leona cogió el árbol y lo tiró al suelo para tragarse todos los caramelos que tenía, porque era una golosa. Entonces, la leona comenzó a retorcerse por el suelo del dolor de tripa que tenía. Más tarde, cogió arena y se la tragó, porque pensaba que así no le dolería, pero se equivocó, porque la tripa le dolía aún más.

La leona salió corriendo de mi casa y se montó en un barco. Al barco se le caía el agua y la fiera se tragó una piedra. La piedra era dura y pensaba que ya no le dolería la tripa si se la comía, pero se volvió a equivocar. Entonces, como ya no podía comer más, porque había comido muchas cosas, pensó en beber agua. Ésta vez sí se le pasó el dolor de tripa.

La leona aprendió que no se pueden comer tantas “chuches” en un día.

Y... colorín, colorado, éste cuento se ha acabado.

FIN

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